Ejercicios para Embarazadas
Los ejercicios deben realizarse de forma regular, con movimientos suaves y una respiración controlada. Pueden mantenerse hasta el final del embarazo
27 de June · 531 palabras.
🕘 Resumen
Durante el embarazo es importante mantener una rutina de ejercicios, siempre y cuando se realice de forma regular y con movimientos suaves y una respiración controlada.
Los ejercicios pueden ser realizados hasta el final del embarazo, a menos que se presenten contraindicaciones por parte del tocólogo.
Los ejercicios respiratorios son una excelente opción, los cuales se basan en soltar el aire prolongadamente y de forma lenta, y se pueden realizar sentada, tumbada boca arriba o de costado.
La caminata es una de las actividades cardiovasculares más recomendadas ya que mantiene en forma sin castigar rodillas y tobillos, además se puede hacer en cualquier lugar, solo se necesita un buen par de zapatos.
La natación es considerada el mejor ejercicio para las embarazadas ya que trabaja los músculos de las piernas y brazos, brinda beneficios cardiovasculares y permite sentirse ligera en el agua.
También se recomienda ejercicios aeróbicos de bajo impacto, en una clase especial de embarazadas para tener una rutina consistente y saludable.
Es importante tomar precauciones básicas y no pretender mejorar tiempos o esforzarse el doble durante el embarazo, pero sí conservar el movimiento siempre.
Los ejercicios deben realizarse de forma regular, con movimientos suaves y una respiración controlada. Pueden mantenerse hasta el final del embarazo (salvo contraindicación del tocólogo). Se realizarán sobre una superficie semidura utilizando ropa y calzado cómodos.
Ejercicios respiratorios
Se pueden realizar en posición sentada, tumbada boca arriba o de costado. Las respiraciones que se utilizan durante las contracciones del parto se basan en soltar el aire (espiración) de forma prolongada y lenta. Pueden ser de dos tipos, abdominales o torácicas.
1- Respiración abdominal: Inspirar elevando el abdomen y espirar descendiéndolo lentamente. Repetir 15 veces.
2- Respiración torácica: Inspirar inflando sólo el tórax y espirar lentamente procurando no movilizar el abdomen. Repetir 15 veces.
Ejercicios cardiovasculares
• Caminar: Es una de las mejores actividades cardiovasculares para las mujeres embarazadas, y te mantiene en forma sin castigar las rodillas y tobillos. Otra ventaja es que se puede hacer en cualquier lugar, no requiere ningún equipo especial aparte de un buen par de zapatos, y es una forma de ejercicio segura durante los nueve meses de espera.
• Nadar: Los médicos y entrenadores físicos consideran la natación el mejor ejercicio para las embarazadas y también el más seguro. La natación es ideal porque trabaja los músculos de las piernas y brazos, ofrece beneficios cardiovasculares, y permite que la embarazada se sienta ligera en el agua a pesar de su aumento de peso.
• Ejercicios aeróbicos de bajo impacto: Una de las ventajas de inscribirte en una clase de ejercicio aeróbico es que te dedicarás al ejercicio en un horario específico y consistente. Además, si te inscribes en una clase especial para embarazadas disfrutarás la compañía de otras mujeres encinta, y tendrás la seguridad de que todos los movimientos son sanos para ti y para tu bebé.
Precauciones básicas a tener en cuenta
Durante el embarazo no podemos pretender mejorar tiempos o esforzarnos el doble, pero si podemos conservar el movimiento siempre y cuando tengamos en cuenta algunas precauciones básicas:
Siempre debemos tener la autorización del médico tratante para realizar ejercicio físico
Se deben evitar las actividades que requieren saltos, excesiva fuerza, movimientos bruscos y muy rápidos dada la alta probabilidad de sufrir caídas u otros accidentes.
Siempre se debe realizar un adecuado calentamiento así como un correcto proceso de vuelta a la calma antes de realizar ejercicio moderado durante el embarazo.
Es preferible el ejercicio regular a la actividad intermitente.
Las actividades competitivas sólo se reservarán para quienes competían previamente.
Se deben realizar chequeos regulares que controlen la frecuencia cardíaca, la respiración ante el esfuerzo y demás factores para eliminar riesgos durante el ejercicio.
Si tomamos estas precauciones, solicitamos la autorización de nuestro médico y no pretendemos desafiarnos ni superarnos en el ejercicio durante el embarazo, podremos permanecer en movimiento durante esta etapa biológica sin sufrir riesgos sino gozando de grandes beneficios para el organismo.
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