Prevención del Sol
Como cuidarnos del Sol.. Consejos para prevenirnos este verano! si queremos mantener la salud de nuestra piel, cada vez que hagamos una actividad física al aire libre (por más abrigados que estemos), el uso de pantallas solares se hace indispensable, tanto en niños como en adultos.
9 de November · 356 palabras.
🕘 Resumen
Aunque exponerse al sol no siempre trae consecuencias negativas, especialistas indican que el 80% de los tumores de la piel podrían prevenirse si se toman las precauciones necesarias.
El uso de protectores solares es vital cada vez que se realiza una actividad al aire libre, incluso en días nublados. Los protectores solares están compuestos por dióxido de titanio, mica y óxido de zinc, que desvían los rayos solares.
Es importante elegir el filtro adecuado de acuerdo al tipo de piel, y se recomiendan aquellos que mantengan su estabilidad frente a las radiaciones y que resistan a la transpiración y al agua, denominados hipoalergénicos.
En invierno, la montaña es uno de los lugares más elegidos, donde la nieve y el hielo pueden aumentar la intensidad de los rayos ultravioletas hasta un 90%, potenciando la posibilidad de sufrir daños.
Por tanto, el uso de protectores solares es esencial para mantener la salud cutánea en todas las épocas del año.
estiman que el 80 por ciento de los epiteliomas (tumores de la piel) podrían evitarse, en aquellas personas genéticamente predispuestas a desarrollarlos, si se toman las precauciones necesarias.
No hay que desatender los consejos de quienes saben. Entonces, si queremos mantener la salud de nuestra piel, cada vez que hagamos una actividad física al aire libre (por más abrigados que estemos), el uso de pantallas solares se hace indispensable, tanto en niños como en adultos.
También en los días nublados, ya que el sol vulnera fácilmente el vapor de agua que componen las nubes. Estos productos farmacológicos, que ofician de escudo contra las radiaciones perjudiciales, están compuestos por dióxido de titanio, mica y óxido de zinc. Todas, sustancias que permiten desviar los rayos solares. Sin embargo, los filtros no son todos iguales: tienen diferentes factores de protección y deben elegirse de acuerdo al tipo de piel.
Cuanto más blanca sea ésta, mayor grado de protección se necesita. Los más recomendados por los especialistas son aquellos que mantienen su estabilidad frente a las radiaciones, que resisten a la transpiración y al agua, también, los denominados hipoalergénicos.
La montaña y sus paisajes, sus inmensos pinos y el imponente silencio, suele ser uno de los lugares elegidos por quienes planifican sus vacaciones para esta época del año. Generalmente, intrépidos que no temen al intenso frío que reina por esas zonas. Las temperaturas bajo cero hacen que buscar el calor del sol se transforme en uno de los objetivos principales y es así como pueden cometerse las mayores imprudencias.
Así como en verano el agua de la pileta o del mar refracta los rayos del sol, la nieve y el hielo hacen lo propio, pero aún con mayor fuerza. La intensidad aumenta hasta un noventa por ciento y los
rayos ultravioletas (UV) potenciados de esa forma, sumado a la altitud que hace que estemos más cerca del sol, pueden causar daños de consideración en la piel.
Para más información, consultar www.salud.es
