Nuevas Generaciones Apagadas
La droga adormece las relaciones entre nosotros y nuestro entorno. Diferentes estudios serios demuestran como muchos de los fracasos de las personas provienen de las adicciones. Trataré por tanto de exponer mi pensamiento sobre el porqué y una pequeña reflexión a una posible solución.
25 de May · 439 palabras.
馃晿 Resumen
El autor del art铆culo observa que la juventud de hoy en d铆a tiene menos expectativas de futuro debido a factores como el desempleo, el fracaso escolar y la falta de control.
Considera que la sociedad se ha vuelto excesivamente artificial y ha inculcado en la mente de los j贸venes que el esfuerzo no es necesario para desarrollarse como persona. Una de las razones de esta situaci贸n, seg煤n el autor, es la falta de autoridad moral de la sociedad.
Los padres y educadores no han sabido encontrar el punto medio entre el exceso de autoridad y la falta total de responsabilidad. Como resultado, los j贸venes se vuelven cada vez m谩s alejados de la realidad y muchos de ellos se adentran en el mundo de las drogas y las adicciones.
El autor cree que la soluci贸n pasa por volver a las ra铆ces profundas de los valores que son esenciales para una sociedad sana.
En conclusi贸n, el art铆culo plantea la necesidad de encontrar un equilibrio entre la autoridad y la responsabilidad en la educaci贸n de los j贸venes para que puedan desarrollarse plenamente en la sociedad.
En mi opini贸n ( solo trato de expresar lo que yo pienso ) hemos convertido esta sociedad en algo excesivamente artificial, algo que en la mente de nuestros j贸venes ha calado como si el esfuerzo no es algo intr铆nsecamente necesario para desarrollarse como persona.
Esto ha venido dado por m煤ltiples razones, pero una de ellas, y para m铆 fundamental, es la falta de autoridad moral de la propia sociedad. El ejemplo que damos a nuestros hijos聽 no es el mejor de los posibles. Las generaciones de padres con hijos de entre 14 y 20 a帽os provienen por lo general de familias que se educaron en el esfuerzo, y posiblemente en un esfuerzo desmesurado; todos recordaremos aquello de la letra con sangre entra.
Ello ha llevado, y repito que es solo una opini贸n personal, a que seamos excesivamente transigentes con las nuevas generaciones. Todos pensamos que aquello era malo y que por tanto no queremos eso para nuestros hijos. Pero, y aqu铆 est谩 el pecado, no hemos sabido encontrar el punto medio. Actualmente nuestros hijos viven al margen de la realidad, y por tanto el fracaso en muchos casos est谩 servido. 驴Como por tanto podemos el fen贸meno de la droga y las adicciones en nuestros hijos sin sentir una cierta culpabilidad?.
Como antes dec铆a hemos creado una sociedad demasiado contemplativa, una sociedad en la que fumarse un porro no se considera malo, en la que la falta de esfuerzo se justifica. Pero es m谩s que evidente que eso lleva a una total y absoluta falta de responsabilidad que se pagar谩 m谩s tarde o m谩s temprano por nuestros j贸venes.
No podemos por tanto entender las adicciones sin la anuencia de los educadores ( padres, profesores, pol铆ticos .... etc. ). Debemos volver a raices profundas en las que encontremos los valores esenciales para una sociedad m谩s justa en todos los sentidos. Pensamos que la justicia debe ser comprensiva, pero preparar el futuro de nuestros adolescentes es hablarles de la realidad, de lo que el d铆a de ma帽ana se encontraran en la calle y de que sin esfuerzo no se llega a ning煤n sitio.
Es posible que tengamos que ser " peores personas " para sacar esta sociedad de la situaci贸n en la que se encuentra.
Jorge Juan Guti茅rrez
http://www.diamantesdecompromiso.com
