El Papel Literario de la Mujer
El papel de la mujer en la sociedad, hoy en día, es muy difícil de definir, al menos en lo que respecta a la literatura. Todos entendemos que durante siglos la mujer se ha encontrado discriminada por el hombre, tanto en derechos como en su deseo de expresarse.
31 de December · 324 palabras.
馃晿 Resumen
En el pasado, las escritoras deb铆an usar seud贸nimos masculinos para publicar sus obras y poder obtener los mismos derechos que los hombres en el mundo literario.
George Sand, George Eliott y otras escritoras aceptaron la presi贸n masculina y las normas impuestas por una sociedad que no ve铆a con buenos ojos que las mujeres se dedicaran a la literatura.
No obstante, tambi茅n hubo mujeres como Carolina Coronado, Gertrudis G贸mez de Avellaneda y Emilia Pardo Baz谩n, que lucharon por la igualdad de g茅nero en lo literario y se atrevieron a brillar con su propio nombre.
Si bien la lucha de estas mujeres era mayor que la de cualquier hombre, lograron dar cabida a las artistas femeninas en un mundo predominante masculino. Actualmente, la cuesti贸n literaria ha cambiado bastante, pero a煤n existe cierta discriminaci贸n.
A pesar de esto, las sociedades evolucionan con rapidez al igual que el pensamiento del hombre, lo que nos deja esperanza de que en un futuro el cambio hacia una igualdad plena se produzca.
La mujer deb铆a de ser algo m谩s que s贸lo una sombra, renacer de sus cenizas y mostrarse nueva ante la sociedad que la vituperaba. Si bien, su lucha era mayor que la de cualquier individuo del sexo masculino, y la presi贸n de los varones sobre las escritoras era a veces insoportable. Sin embargo, muchas de estas mujeres lograron dar cabida a las artistas femeninas en un mundo predominantemente masculino. Ellas lucharon para lo que nosotras disfrutamos actualmente, cosa que muchas veces no ha sido reconocida.
Hoy en d铆a la cuesti贸n literaria ha cambiado bastante, aunque sigue existiendo cierta discriminaci贸n inevitable. Aquello de La mujer y la sart茅n en la cocina est谩n bien parece ser un t贸pico de ciertos sectores a煤n anclados en el pasado y que quieren recordar las injusticias que se cometieron en el pasado como si siguieran hoy en d铆a vigentes. Gracias a Dios, las sociedades evolucionan con rapidez, al igual que el pensamiento del hombre. Si no cambia la sociedad en lo profundo, al menos si hay indicios de que se intenta el cambio y de que nos queda esperanza para que en un futuro ese cambio se produzca plenamente.