¿Qué Servidor Debo Elegir para Mi Empresa?

Cuando a una empresa se le queda pequeño contratar un hosting o necesita más rendimiento, flexibilidad y control total para disponer de algún proyecto en Internet, entonces llega el momento de preguntarse ¿Qué servidor elegir para mi empresa?

Ricardo Dargence
Ricardo Dargence
28 de November · 342 palabras.
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🕘 Resumen

La elección de un servidor para una empresa puede parecer una decisión compleja, especialmente si se necesita más rendimiento, flexibilidad y control para un proyecto en Internet.

Existen diversas opciones para disponer de un servidor, pero es importante considerar si realmente es necesario comprar uno propio o si es mejor contratarlo.

Si se opta por la compra de un servidor, se debe tener en cuenta su ubicación física, la cual debe cumplir ciertas condiciones óptimas de temperatura, limpieza y seguridad para evitar problemas como el sobrecalentamiento o la acumulación de polvo.

Además, se requiere una conexión a Internet optimizada y los costes de mantenimiento del sistema y hardware.

Por otra parte, al contratar un servidor con una empresa especializada, esta se encarga de todos los aspectos mencionados, desde la ubicación hasta el mantenimiento, lo que puede resultar más cómodo y económico para la empresa.

En definitiva, la decisión final dependerá del presupuesto, las necesidades y la capacidad de la empresa para manejar un servidor propio.

Cuando a una empresa se le queda pequeño contratar un hosting o necesita más rendimiento, flexibilidad y control total para disponer de algún proyecto en Internet, entonces llega el momento de preguntarse ¿Qué servidor comprar para mi empresa?. Existe un amplio abanico de posibilidades para disponer de un servidor, pero ¿Realmente interesa comprar un servidor para mi empresa o es mejor contratar un servidor?.

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Con el hecho de comprar un servidor propio se entiende que se desea comprar un “ordenador-servidor” para llevárnoslo a nuestra empresa y supone que vamos a disponer de una ubicación física para colocarlo y conectarlo a Internet. Esto conlleva considerar una serie de puntos adicionales;

La ubicación física para el servidor no debe ser cualquier rincón de las oficinas de la empresa. Los servidores deben de estar ubicados en espacios adaptados para cumplir una serie de condiciones óptimas de temperatura, limpieza y seguridad. Si no se dispone de un espacio especialmente acondicionado para servidores, probablemente el servidor se sobrecaliente, recogerá una gran cantidad de polvo y suciedad, no contará con mecanismo de prevención de catastrofes (extinción de incendios, subidas de tensión, etc.) e incluso podrá ser manipulado por cualquier persona con acceso físico.

La conexión de Internet debe de estar optimizada para garantizar la máxima disponibilidad. Si la conexión de Internet es lenta, lo sufrirán los usuarios que deseen acceder al servidor desde la red.
Mantenimiento del sistema y hardware. Disponer de un servidor en la empresa supone una serie de costes de mantenimiento, cuotas de electricidad, etc.

Teniendo en cuenta los puntos anteriores sumado al “elevado” precio que puede tener un servidor, tal vez te interese mucho más contratar un servidor. Cuando se contrata un servidor con alguna empresa especializada en estos servicios, suele ser la propia empresa la que gestiona todas las consideraciones anteriores: Los servidores se encuentran conectados en ubicaciones especialmente acondicionadas y con un mantenimiento garantizado.


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