Desarrollo, Sistemas Biométricos y Relojes Biométricos
Un control de acceso, que esté basado en sistemas biométricos, ofrece un mecanismo que es ideal para aumentar la seguridad en muchos lugares, que así lo requieren. Consecuentemente, estos controles ya se han hecho muy populares en la actualidad.
24 de February · 456 palabras.
🕘 Resumen
El control manual de asistencia laboral se está convirtiendo en algo del pasado gracias a la aparición de métodos avanzados, como la biometría, que ofrecen mejores resultados.
Actualmente, los departamentos de recursos humanos, contabilidad y nómina de las empresas pueden contar con estrategias modernas para optimizar sus procesos. La biometría utiliza tecnología para capturar rasgos faciales y compararlos en un cotejo de muestras.
Para reportar la asistencia de un trabajador, se debe suministrar una muestra al dispositivo principal. La persona debe pararse frente a una cámara para tomar una foto y luego identificar los detalles de su rostro que se guardarán en un banco de datos para su comparación posterior.
El sistema ejecutará una búsqueda para ver si la muestra tomada se encuentra en su base de datos. La instalación de estos sistemas es sencilla, y los datos ocupan poco espacio en el disco duro del ordenador.
También es posible encontrar otros sistemas biométricos, como lectores de huellas digitales o patrones oculares, cuyo funcionamiento es similar al análisis de rasgos faciales.
En resumen, la biometría permite una mayor eficiencia en el control de asistencia laboral y puede ser una ventaja tanto para la empresa como para los empleados.
Uno de los nuevos avances, tiene que ver con la biometría. La aplicación de la biometría se basa en tecnología, que captura rasgos de la cara para luego compararlos en un cotejo de muestras. Para reportar la asistencia a un lugar de trabajo, por medio de este sistema, hay que suministrar una muestra al dispositivo principal. Para esto la persona debe parase frente una cámara, la cual toma una foto para identificar los detalles del rostro. Estos detalles se guardan en un banco de datos, de un ordenador, para su posterior comparación. La próxima vez que la misma persona pase por el sistema, la cámara volverá a tomar los detalles de su cara y el sistema ejecutará una búsqueda, para ver si la muestra tomada en el momento, se encuentra en su banco de datos. De ser así, la persona analizada podrá ingresar a su lugar de trabajo y se tomará un registro electrónico de dicho permiso. De esta manera, se evita el innecesario papeleo, a la vez que se le facilitan las cosas al empleado y la empresa salva parte de su presupuesto anual.
Contrario a lo que se pudiera pensar, la instalación de estos sistemas biométricos es muy sencilla. Por lo general, basta con conectar un lector a un ordenador y el sistema podrá ser puesto en marcha. Por otra parte los datos, que se almacenan en su base de datos, ocupan muy poco espacio en el disco duro del ordenador.
En el mercado es posible encontrar otros sistemas biométricos como lectores de huellas digitales o de patrones oculares. El funcionamiento de éstos es similar al del análisis de rasgos faciales: primero se registra una muestra en el sistema, que se almacena en una base de datos, para ser comparada después. Lo único que cambian en cada uno de estos acercamientos es la cualidad a analizar.
Como se puede percibir, los sistemas biométricos son ideales en un proceso de modernización empresarial. Con la instalación de relojes biométricos es posible agilizar muchos de los procedimientos, que se llevan acabo al interior de una organización, lo cual es el objetivo de toda compañía que quiera salir adelante.
Basándose en sistemas biométricos, un control de acceso puede convertirse en un mecanismo útil para cuidar la seguridad de empresas, oficinas y hasta hogares. Consecuentemente, la seguridad biométrica es una de las mejores.