Las Costumbres Sexuales Más Insólitas de áfrica
Desde nuestro punto de vista Occidental, el que creemos liberal y adaptado al mundo en que vivimos, pocas costumbres sexuales consideramos que podrían escandalizarnos. Sin embargo, si viajamos por África, nuestra capacidad de asombro podría verse extralimitada.
2 de August · 508 palabras.
🕘 Resumen
El continente africano es uno de los lugares donde se encuentran costumbres sexuales más insólitas, como el matrimonio entre mujeres en la República de Benín, donde una mujer puede convertirse en esposa y marido a la vez previo pago de una dote, y desempeñar el papel de padre de los hijos que su pareja tenga con un amante asignado.
Por su parte, entre los hombres africanos es común que los jóvenes inicien sus primeras relaciones sexuales con ancianos, especialmente en el contexto de felación, ya que en algunas sociedades se cree que el semen es un líquido vital.
En otras regiones como Madagascar, ser homosexual no está mal visto, mientras que ser estrictamente heterosexual puede ser objeto de burlas.
En Mozambique, las mujeres pueden prestar a sus maridos a otras mujeres con problemas de fertilidad, mientras que el pueblo Chewa fomenta la actividad sexual desde la infancia para evitar problemas de concepción.
Por último, en el África Sudecuatorial, los hombres Bantúes se untan el pene con veneno para evitar el adulterio.
Si nos adentráramos en el África Occidental y haciendo frontera con Togo, llegamos a la República de Benín, allí es muy frecuente que una mujer pueda casarse con otra mujer previo pago de una dote. Esto la convierte en mujer y marido a la vez, por decirlos de alguna manera, ya que en un futuro desempeñará el papel de “padre” de los hijos que su mujer tenga con un amante “asignado”.
Por otra parte, y en cuanto a los hombres se refiere es muy común entre los pueblos africanos que los jóvenes tengan sus primeras relaciones sexuales con los más ancianos, practicándoles felaciones, ya que la creencia para estas sociedades es que el semen en una especie de “liquido vital”. Pero lo más llamativo es que los jóvenes excesivamente fuertes y vigorosos podían ser castigados al presuponer que habían ingerido grandes cantidades de semen fuera de estos rituales.
De la misma manera que en Madagascar entre los Sakalaves no está mal visto ser homosexual, lo que puede ocasionar burlas es ser estrictamente heterosexual.
Sin salirnos de las costumbres africanas, nos llama la atención como en Mozambique aún existe la practica de que la mujer pueda “prestar” al marido a otras mujeres que tengan problemas para fecundar; o por el contrario los hombres presten a las mujeres para poder concebir. Quizá sea por ello, por lo que otro pueblo africano, los Chewa, y con el fin de evitar esta practica, consideren que es necesaria la actividad sexual desde la misma infancia para así evitar problemas de fecundación.
Pero no todos los pueblos son tan “liberales”, así en el África Sudecuatorial con el fin evitar el adulterio los hombres Bantúes tienen por costumbre untar su pene con un veneno antes de hacer el amor con su esposa. Se cree que el veneno no afectaría a la esposa pero sí al posible amante.
Las iniciaciones al mundo del sexo son también muy variopintas. Para el pueblo Dschagas, que habita en el África más Oriental, es inconcebible que un joven no pueda tocar a una niña hasta que sea circuncindado en un rito de iniciación.
En el mismo rito el pueblo de los Ljo tiene por costumbre que los adolescentes deban de copular con una oveja siempre en presencia de los mayores.
En el Congo, los Azande creen que una niña será estéril si su madre no le escupe en la espalda el día se su boda.
Pero hasta para excitarse antes de tener relaciones hay ejemplos asombrosos; al pueblo de los Hotentotes les excita ver los genitales de ciertos animales más que los cuerpos de los hombres o mujeres.
Siempre se ha dicho que África es el Continente de los contrastes, algo que también vemos en sus costumbres sexuales.